El Wurstebrot se suele cortar en rodajas de un grosor de uno a medio centímetro y se suele asar en una sartén con mantequilla junto con rebanadas de patata o Klöße.
El centeno en este embutido hace que cuando se fría en la sartén se aglutine y solidifiquen los ingredientes dando una consistencia similar al pan (recordando en textura y color al pan Pumpernickel), es muy posible que el nombre en alemán Wurst-brot (que se traduce como: Salchicha-pan) haga recordar esta característica.
En las épocas en las que se hacía matanza del cerdo en Münsterland el Wurstebrot se cortaba en trozos pequeños y se hacía una especie de puré que se freía junto con tocino que se solía emplear como desayuno, a este plato lo denominaban "Wourstbrotssoppen".
Hoy en día se suele servir de manera muy simple en los restaurantes de la zona, se vierte el contenido de la sartén en un plato y se come caliente.
Es frecuente a menudo un acompañamiento del Leberbrot (un embutido similar con hígado de cerdo).