Weltpolitik

Dicha política pretendía encontrar un lugar en el espacio europeísta para Alemania proporcional a su creciente poder industrial, principalmente mediante la creación de un imperio colonial que pudiera rivalizar con el de otras potencias.

El elemento más espectacular en esta política fue la creación de la Marina Imperial (también conocida como la Flota de Altamar), una flota que pudiera rivalizar, e incluso superar, en fuerza a la Armada Real del Reino Unido.

Esto condujo a una carrera en el desarrollo naval entre Alemania y Gran Bretaña.

A pesar de ser antiguos rivales en sus ambiciones imperialistas, Francia, Reino Unido y Rusia, se aliaron contra el poder naval alemán.

En gran parte, la Weltpolitik era vista como una consecuencia del desarrollo industrial de Alemania en los últimos años.