Vuelo 4590 de Air France

Ese día, el Concorde francés sufrió un accidente al despegar, estrellándose en Gonesse, Francia.

Sin embargo, existen dos hipótesis al respecto aceptadas en el informe oficial de investigación que siguió al accidente: ignición por un arco eléctrico o por el contacto con las secciones calientes del motor.

Aunque el capitán todavía no podía ver las llamas, era consciente de que los motores 1 y 2 estaban perdiendo potencia.

Instantes después, el controlador de torre divisó fuego en la parte trasera del avión y lo notificó al capitán, informándole que tenía prioridad para volver a la pista.

[3]​ Un video de 15 segundos captado por un camionero español muestra al avión en llamas cruzando una autopista.

[3]​ Aun así, medios de comunicación y testigos presenciales calificaron a Christian Marty como un héroe, por haber logrado dirigir el avión -lo que terminaron siendo sus últimos segundos de vida- hacia el área menos poblada que encontró, en un intento por minimizar el número de víctimas.

Esta pieza de titanio perforó un neumático del Concorde, que se desintegró.

Los cables crearon chispas que encendieron el combustible derramado sobre los motores.

Sin embargo, las altas temperaturas provocadas por el incendio (más de 1.000 °C) hicieron que los soportes del ala comenzaran a fundirse, provocando el colapso del avión.

[17]​ Continental negó la responsabilidad en los cargos que se le imputaban,[18]​ defendiendo en el juicio que la aeronave ya estaba en llamas cuando pasó sobre la pieza de titanio.