Nuestra Señora de Europa o la Virgen de Europa es una advocación a la Bienaventurada Virgen María cuya devoción inició en Gibraltar y en menor medida en Algeciras, España.
Junto al mar y en el punto más meridional del lugar edificaron una mezquita.
La Virgen sostiene en su mano derecha un cetro con tres flores que simbolizan el Amor, la Verdad y la Justicia.
El rey Felipe II construyó altos muros alrededor de la ermita para su protección.
La restauración del Santuario abandonado comenzó en 1962 y en septiembre de este mismo año se celebró otra vez misa en el lugar.