Los residentes del edificio de apartamentos están siendo infectados paulatinamente por estos extraños parásitos que los convierten en personas locas con el único objetivo de infectar a otros a través del contacto sexual.
Durante ese periodo el equipo se alojaba y dormía en las mismas localizaciones mostradas en la película.
[8] El crítico Roger Ebert le concede 2,5 sobre 5 indicando "Asusta e impacta por su buena puesta en escena: el director-guionista, David Cronenberg, emplea su capacidad inventiva e imaginación para paliar la ausencia de efectos especiales".
[9] Chuck Bowen, en su reseña para Slant, incide "la ambientación, una extensión del espeluznante estilo que empleó en Stereo y en Crimes of the Future, es fría y húmeda, estridente, vulgar e imposible de obviar".
[10] Mick LaSalle en SFGate señala "Una paranoica y lasciva pesadilla sexual.(...)