El término municipal, ubicado en la comarca del Bajo Campo, tiene una población de 553 habitantes (INE 2024).
Parece ser que la repoblación fue lenta y no es hasta el siglo XIV cuando el municipio empezó a tener una cierta relevancia.
En el siglo XVIII pertenecía aún a la señoría del ducado de Cardona.
En febrero de 1714 la villa fue atacada por las tropas felipistas por haber dado cobijo a algunos seguidores del Carrasclet.
Ese día, los niños del pueblo salen a la calle arrastrando latas y otros objetos metálicos.