[8] El sencillo vestido en satén color crema tejido en Spitalfields, al este de Londres, estaba adornado con un volante ancho y encajes hechos a mano en Honiton y Beer, en Devon.
Aunque la fotografía ya existía en 1840, las técnicas aun no estaban todavía plenamente desarrolladas.
[10][11] La Colección Real ha refutado estas interpretaciones, declarando que las imágenes son las primeras fotografías en mostrar a Victoria como reina, en lugar de como esposa o madre, y que ella y Alberto llevan ropas de corte.
Victoria volvió a visitar a los fabricantes de encajes para encargar el vestido de bautismo usado para todos los bebés reales, incluyendo Alberto Eduardo (el futuro Eduardo VII).
[22] En 2012 se informó que si bien el vestido en sí se había conservado y exhibido en el Palacio de Kensington ese año, el encaje era ahora demasiado frágil para moverlo de su almacenamiento.
[8] Vestir de blanco en la boda fue rápidamente adoptado por las novias ricas, a la moda.