Entre los reptiles, podemos encontrar el Gallotia Stehlini, lagarto endémico de Gran Canaria.
Estos labradores fueron los primeros habitantes del municipio de Valleseco que comenzaron a escribir su reciente historia.
En 1842 comienza su andadura con su ayuntamiento propio, siendo por tanto el más joven de los municipios grancanarios.
A este personaje singular se le ha dedicado una calle en el casco urbano del municipio.
Las obras finalizaron seis años después y con esta fábrica se pretendía aliviar a los vecinos del penoso esfuerzo de desplazarse a Teror para cumplir con sus deberes religiosos.
Tras casi un siglo, en 1843, se consigue la independencia parroquial, con el primer presbítero, Francisco Bernardo Guerra.
Más adelante, en 1887, por el deterioro y poca capacidad de la vieja ermita, se decide construir la actual iglesia.
La fruta más destacada es la manzana, producida con dos variedades principales: la reineta del Canadá y la manzana francesa, con las cuales se produce sidra de gran calidad y premiada en certámenes internacionales.
[9] La bandera de Valleseco se divide diagonalmente en dos mitades desde el ángulo superior izquierdo al inferior derecho, la mitad superior verde y la inferior de color oro viejo.
El verde es el color predominante en los prados, árboles y sementeras de Valleseco durante buena parte del año.
El oro viejo es el color dominante durante el verano, cuando maduran las sementeras, en especial trigo, centeno y millo.
El pozo artesiano simboliza el esfuerzo y la riqueza que representa la extracción de agua.
El templo y el escudo parroquial representan el origen del municipio por segregación de la parroquia, perteneciente a Teror, en 1842, fecha que aparece en la cinta.
Estos aún se pueden ver a lo largo del barranco en la actualidad así como las huellas de antiguos molinos que dan testimonio del pasado de la comarca ligado al agua.
Los diferentes árboles que componen este bosque, único en el mundo, se pueden observar paseando por La Laguna.
Por sus características geológicas ha sido declarado monumento natural, perteneciendo ahora a la Red Canaria de Parques Naturales Dejando atrás la parte más poblada del municipio, a pocos kilómetros del casco, se sitúa el Cortijo de Calderetas, hasta el que se accede caminando desde la carretera por una pista de escasos metros...
Constituye un bello paisaje formado por una amplia caldera volcánica rodeada de castaños, olmos y pinares en cuyo interior se asienta una casa tradicional canaria de finales del siglo XIX con tejado a dos aguas.
El Pico de Osorio es un mirador natural desde el que se puede observar todo el norte insular.
En la parte de Valleseco hay un sendero al que se llega entrando hacia La Laguna.Si continuamos a la derecha una vez pasamos La Laguna, pronto aparecerá ante nosotros la estampa del inconfundible Pico de Osorio.
[14] Administrativamente, el término municipal se divide en los siguientes barrios sus respectivos núcleos: Cincuenta días después del lunes de Pascua, se celebra la fiesta en honor de San Vicente Ferrer, patrono del Municipio, durante las mismas hay diferentes actos como actuaciones musicales, fiesta infantil, verbenas, etc.
El broche final de las fiestas lo pondrá la Santa Misa cantada por la Agrupación Virgen del Pino y posterior procesión por el recorrido habitual, terminada la procesión, desfile del ganado premiado en la feria ante la imagen de la Patrona.
La actividad económica del municipio se basa en la agricultura, la artesanía, el comercio y la industria alimentaria (carniceria, charcutería)