[1] Son animales de gran rusticidad, pequeño tamaño, rojizos o castaños y cóncavos.
Ganado montaraz y huidizo, es característica su rebeldía derivada de su crianza asilvestrada.
[1] La raza monchina refleja fielmente los rasgos típicos de su tronco étnico ancestral, Bos taurus cantabricus: perfil recto o subcóncavo, mesomorfosis y elipometría, poca masa y reducido hueso.
El tupé no es abundante, de color más oscuro con respecto a la cara.
Es una raza leonada de mucosas negras y pezuñas del mismo color.
Es un grupo de ganado bravo, individuos muy rústicos de temperamento arisco que, acosados, no tardan en embestir, cualidades usadas para la lidia en fiestas locales o familiares, y donde eran más demandadas las vacas que los toros.
Con vigilancia ocasional y a distancia, los ganaderos sólo toman contacto con sus animales para extraer la producción anual o, en ocasiones, para llevar a cabo controles de obligado cumplimiento como controles administrativos y sanitarios.