En este lugar Mundlos empieza a relacionarse con quienes serían los futuros integranes y colaboradores de la Clandestinidad Nacionalsocialista, Uwe Böhnhardt, Beate Zschäpe, Ralf Wohlleben, Holger Gerlach y André Kapke formando una camaradería en Jena, donde era considerado el líder.
En ese mismo año, Mundlos comienza su servicio militar obligatorio en las Barracas de Kyffhaeuser en Bad Frankenhausen.
Se llega a relacionar con la "división alemana" de "Blood & Honour", una organización ultraderechista creada en Reino Unido.
Al miamo tiempo, el Servicio de Inteligencia alemán señala a Mundlos como peligroso.
Mientras vivió en la clandestinidad, Mundlos sostuvo la identidad falsa de Max Florian Burkardt.