En 1464, el rey Juan II de Castilla donó la villa a don Pedro Girón, mayordomo y favorito del entonces príncipe y futuro rey Enrique IV.
Su hijo (ilegítimo, pero reconocido) Alfonso Téllez-Girón de las Casas fue nombrado I Conde de Ureña en 1462 por Enrique IV.
En 1492, Juan Téllez Girón, II Conde de Ureña, entra en Granada junto con los Reyes Católicos.
Esta título pervive hasta el siglo XX, en el que lo ostenta D. Joaquín de Silos Millán, al que le fue concedido en 1995 (B.O.E., RD.
El apellido se extendió a América ya desde el siglo XVI.