Ultramontanismo y ultramontano hacen referencia a un tipo de doctrina sobre el tipo de relación que debe mediar entre la Iglesia católica y los Estados con los que mantiene concordatos.
[1] En la actualidad, los sectores católicos ultramontanos son aquellos que defienden posiciones integristas, es decir contrarias a la separación de la Iglesia y el Estado y al laicismo dictados por el Concilio Vaticano II (1962-1965).
Abogando por las libertades civiles bajo el imperio de la ley justa y equitativa.
En el caso concreto de España dicha posición se «traducía en el derecho al patronato regio».
[6] Ya en el siglo xix, el ultramontanismo se fomentó con el papa Pío IX, que más tarde sería beatificado por Juan Pablo II,[7] y considerado defensor supremo de la definición de la infalibilidad papal.