Puede ser crujiente o blando y tiene la apariencia de un crepe.
Es el pan preferido para acompañar el surströmming (arenque (Clupea harengus) fermentado), así como otros platos de la cocina sueca.
La versión crujiente se hace de una masa más delgada y se le agrega hinojo y anís para aromatizarlo.
La masa se prepara en proporciones relativamente iguales con leche y las harinas indicadas al comienzo.
Se amasa y se adelgaza con un rodillo de cocina, se corta la masa en discos o rectángulos y se le da un último repaso con un rodillo de cocina de superficie irregular para darle su apariencia típica.