Las novelas se establecen en un futuro cercano, en un mundo distópico, dominado por grandes corporaciones y una ubicua tecnología, que emerge después de una limitada Tercera Guerra Mundial.
Los eventos de las novelas están espaciados a lo largo de 16 años, y aunque aparecen personajes comunes, cada novela cuenta una historia propia sin ligaduras que obliguen a leer las demás.
William Gibson se centra en los efectos de la tecnología, como las inintencionadas consecuencias al filtrarse la investigación de los laboratorios a la calle, donde encuentra nuevos propósitos.
En las historias, esto se explica con la IA convirtiéndose en una representación consciente de la red, en cuyo punto se revela que llegó a conocer a otra IA similar de Alpha Centauri.
Gibson explora un mundo de conexiones directas hombre-máquina, donde emergen máquinas inteligentes y un espacio global de información que él llama la matriz.