[2] En 1845, Mendelssohn comenzó a componer su segundo trío con piano en Frankfurt.
Al enterarse de su estancia en la ciudad, muchos visitantes buscaron a Mendelssohn, incluido un estudiante inglés llamado W. S. Rockstro.
[3] El trío sirvió de inspiración a Johannes Brahms, y éste hizo referencia al tema inicial del final en el scherzo de su Sonata para piano n.º 3, op.
Como en los primeros scherzos de Mendelssohn, la forma lúdica y salvaje del movimiento mantiene su gran energía hasta el final.
[4] La música se suaviza abruptamente y termina con nítidos acordes de pizzicato.
Después de la introducción del tema inicial, la obra cita Gelobet seist du, Jesu Christ, y luego se expande para incluir también una melodía de salterio ginebrino del siglo XVI, conocida por su asociación con el Salmo 100 (William Kethe), como la melodía culminante.