Este puesto le valió para darse a conocer tanto entre el público japonés como en la Dieta.
[4] Pero dada la rareza de la coalición (por su composición), este nuevo gabinete no tuvo un liderazgo fuerte.
Por su parte, el gobierno recibió numerosas críticas acusado de una mala coordinación en la ayuda a las víctimas.
Consecuencia de estos resultados, se refundó como Partido Socialdemócrata y Murayama fue elegido presidente del mismo.
Aunque siguió durante algún tiempo más en la dirección del nuevo partido, en el año 2000 anunció su retirada de la política activa.