Al ejecutar a su esposa junto con sus supuestos cómplices, Ieyasu declara abiertamente su posición en el conflicto existente entre los clanes Oda - bajo las órdenes de Oda Nobunaga; y Takeda - dirigido por Takeda Shingen.
El territorio en donde se desplegaba el mayor poder del clan Tokugawa era Mikawa.
En 1590, el nuevo regidor de Japón, Toyotomi Hideyoshi dirigió a Tokugawa Ieyasu atacando los dominios del clan Hōjō, en lo que llegaría a conocerse como el Sitio de Odawara (1590).
Hideyoshi enroló a Ieyasu en dicha campaña prometiéndole intercambiarle las cinco provincias que estaban bajo su control por un territorio más vasto que incluía las ocho provincias de Kantō y la ciudad de Edo.
Teniendo en cuenta que los clanes Hōjō y Tokugawa tenían buenas relaciones, y para evitar que Ieyasu desertara, Hideyoshi toma como rehén a Nagamaru, hijo de Ieyasu de tan solo once años de edad.