Todas las almas es la sexta novela del escritor español Javier Marías, publicada inicialmente en 1989 por la Editorial Anagrama,[1] basada en los dos años que vivió en Oxford dando clases en dicha Universidad.
Entre los primeros personajes que menciona en la novela se encuentra Will, el anciano portero del edificio donde trabajaba, quien amanecía cada día como si estuviera en un año distinto, y saludaba amablemente a los profesores confundiendo sus nombres.
[11] Cromer-Blake acogió al narrador como su guía, protector y quizás su única amistad verdadera en la ciudad.
En medio de estas búsquedas, Alan Marriott, un ex librero cojo y con un terrier manco como mascota, lo convenció de asociarse a la Machen Company, una organización dedicada a la obra del autor.
Kavanaugh le presentó a Muriel, una mujer muy distinta de Clare con la que se terminó acostando.
[17] Desesperado por la frialdad de Clare, un día la encontró junto a su padre y su hijo en el Museo Ashmolean.
Al dirigirse a la oficina de Cromer-Blake para desahogarse y contarle acerca de su plan, husmeó sin querer por una puerta tras la cual su amigo suplicaba a un joven ajeno al estudiantado, que volviese a acostarse con él; no obstante, éste se negaba, justificando que no quería hacerlo por Dayanand, el médico indio de Cromer-Blake, quien también resultaba ser gay.
Pero en lugar de acostarse, ésta le confesó un recuerdo íntimo, que tenía como protagonista a Clare Newton, su madre, quien tuvo en Delhi un amante llamado Terry Armstrong durante aproximadamente un año y medio.
[20] La última noche en Oxford el narrador organizó una pequeña fiesta de despedida, yéndose al día siguiente solo a la estación, dado que Cromer-Blake se encontraba muy mal de salud.
En el trayecto vio a Edward Bayes con otra joven que bien podría ser una amante.