Three cheers for sweet revenge

Él le dice: “Tengo que estar con ella”, y el Diablo le dice: “Entonces tráeme las almas de mil hombres malvados; te enviaré de regreso a la Tierra, y cuando mates al último, la encontrarás”».[4]​ En este mismo sentido, la revista Rolling Stone describe que en el álbum hay humor negro y también «un corazón negro» y menciona como ejemplo a la canción «I'm Not Okay (I Promise)», a la que califica como «un conmovedor himno para los jóvenes deprimidos».[4]​ Allmusic afirma que la instrumentación en el disco es hiperactiva, y que pareciera querer decir «pasemos a la siguiente nota AHORA»; también describe al álbum como un corte «musicalmente claustrofóbico, desarreglado y cargado de adrenalina».[5]​ Ian Mathers de la revista Stylus considera que en este álbum, con respecto al anterior, la banda ha mantenido su concepto del mundo hiperromántico, obscuro, no lejos del gótico, fatalista y de humor negro.[8]​ Por último, desde septiembre de 2005 la banda llevó a cabo su primera gira mundial, durante la que ofrecieron conciertos en Estados Unidos, Europa y Canadá.[10]​ El grupo tenía planeado crear un cuarto videoclip, para la canción «You Know What They Do To Guys Like Us In Prison»,[11]​ aunque esto nunca se concretó.Además, sostuvo que la historia del disco estaba «pintada en colores saturados», y que «incluso las bromas son rendidas en osados golpes: los títulos de las canciones —“The Jetset Life Is Gonna Kill You”, “It's Not A Fashion Statement, It's A Death Wish”— se leen como perfectos stickers de parachoques para un coche fúnebre».
My Chemical Romance tocando en un concierto