The Count of Monte Cristo (2002) ("La venganza del Conde de Monte Cristo" en España), es una película estadounidense dirigida por Kevin Reynolds y protagonizada por Jim Caviezel, Richard Harris, Henry Cavill, Dagmara Domińczyk, Luis Guzmán, Guy Pearce y James Frain.
Al llegar a tierra firme, Dantés y Mondego son perseguidos por los dragones ingleses, que creen que son espías del exiliado emperador francés Napoleón Bonaparte.
Mientras tanto, Edmundo y Mercedes pasan el resto del día juntos en una parte aislada de Marsella al lado del mar, nadan, hacen el amor y conversan acerca de su futuro.
Mondego, en estado de ebriedad, habla con Danglars sobre la carta que Napoleón le dio a Dantés cuando estuvieron en Elba, Danglars aprovechando la situación, acusa Dantés por traición, Edmundo es arrestado y enviado ante el magistrado de la ciudad, J.F Villefort.
Días después, Villefort envía una carta a Mercedes anunciando, falsamente, que Dantés ha sido ejecutado.
Al cumplir 7 años en If, Edmundo, inesperadamente se hace amigo de Abate Faria, un sacerdote párroco y ex-soldado del ejército bonapartista, quien ha estado preso en If durante 11 años, Abate irrumpe en la celda de Edmundo a través de un túnel subterráneo, que había cavado durante 5 años, para escapar.
Dantés derrota a Jacopo en un duelo de cuchillos, Edmundo muestra piedad hacia Jacopo, y en lugar de matarlo, hace un trato con Vampa para dejarlo vivir y ser reintegrado a su tripulación, el cual Vampa acepta.
Con la inmensa fortuna del tesoro de Spada, Edmundo se convierte en el "Conde de Montecristo"; un extranjero sumamente rico, con propiedades y negocios tanto en Francia, como Italia, pero, instalándose principalmente en París.
Esa noche, más tarde, Mondego se reúne con Villefort y le menciona que su hijo oye a Montecristo pronunciar las palabras oro y ´Spada´, creyendo que el envío es tesoro de Spada, hacen un complot para robarlo.
En la fiesta, Mercedes reconoce inmediatamente a Edmundo, de quien ella todavía está enamorada.
Luego de la celebración, Jacopo le permite a Mercedes ocultarse en el carruaje de Montecristo para hablar con él, queriendo que su amo abandone su obsesión con la venganza y simplemente viva su vida.
Villefort es subido a una carroza e intenta suicidarse, con resultado negativo, para después ser encarcelado.
Más tarde, Mercedes busca a Edmundo en su residencia, dándose cuenta de quién es.
Fernando se va para su finca familiar abandonada, donde el cargamento de oro robado debía ser tomado.
Sin embargo, lejos de disculparse, lo insulta y lo insta a que culmine su venganza.
Dantés se enfrasca con Mondego en un duelo de espadas, el cual finaliza cuando Dantés apuñala a Mondego a través del corazón, y ante la vista de Alberto, Fernando muere.
Al final de la historia, Haydeé confiesa su amor a Montecristo y se marcha con él.
Cuando Morrel afirma no creer en ellos, Montecristo le confiesa su verdadera identidad para demostrarle que sí existen.
Es envenenada por la segunda esposa de Villefort pero sabiendo que Morrel la ama, Montecristo revierte los efectos del veneno y la deja intencionalmente en estado catapléjico temporal.
Creyéndola muerta, es sepultada y posteriormente rescata por Montecristo quien la oculta de su padre.
Al final del libro, Montecristo lleva a Maximiliam ante ella y les pide que sean felices juntos.