[3] Fue precedido por un sismo menor ocurrido entre las 9 y 10 de la mañana.
El sismo principal dejó cuantiosos daños, sobre todo con las edificaciones hechas de cal y canto que sufrieron desplomes parciales o totales.
Entre las personalidades que murieron fue el propio oidor don Juan de la Santa Cruz, quien falleció aplastado en su residencia.
Investigaciones posteriores descubrieron que el Camino de Cruces, un camino empedrado usado durante la época colonial como medio de comunicación interoceánico entre Sudamérica y España, se había desplazado tres metros de su punto original.
[4] Le sucedieron numerosas réplicas que ocurrían de manera casi diaria, hasta el 21 de agosto del mismo año.