Este terremoto fue el primero en los Estados Unidos que fue emitido en la televisión en directo.
[5] Dado que se habían presentado muchos pronósticos para la región cercana a Loma Prieta, el evento de octubre de 1989 no tomó por sorpresa a los sismólogos.
En 1988 se presentó un pronóstico actualizado, momento en el que Lindh aprovechó la oportunidad para asignar un nuevo nombre al segmento de San Juan Bautista: segmento Loma Prieta.
Sus efectos incluyeron ventanas rotas en Los Gatos y otros daños leves en Holy City, donde se observó un aumento del flujo en un pozo de agua.
Daños más moderados resultaron del sismo del 8 de agosto de 1989 (intensidad VII, muy fuerte) cuando se cayeron chimeneas en Cupertino, Los Gatos y Redwood Estates.
También en Los Gatos, un hombre murió al caer o saltar por una ventana e impactar el suelo cinco pisos más abajo.
En sitios con terreno rocoso, la duración fue más corta y el temblor mucho menos intenso, y en lugares con suelo no consolidado (como el Marina District, en San Francisco o el Viaducto Cypress Street en Oakland) la intensidad del temblor fue más severa y extensa.
Debido a que la ruptura tuvo lugar bilateralmente, la duración del fuerte sismo fue de aproximadamente la mitad de lo que habría sido si el rompimiento hubiera sido en una sola dirección.
La ruta estatal 17 estuvo bloqueada durante varias semanas por un gran deslizamiento y una persona murió por un desprendimiento de rocas en la costa.
[13] Cincuenta y siete de las muertes fueron causadas directamente por el terremoto; se determinaron seis más como indirectas.
Por la inusual circunstancia de que ambos equipos pertenecían al área afectada (los San Francisco Giants y los Oakland Athletics), muchas personas habían salido temprano del trabajo, o se quedaban hasta tarde para ver el partido con compañeros de trabajo y en festejos posteriores.
Los primeros reportes de los medios no tuvieron en cuenta el efecto del partido en el tráfico y estimaron inicialmente en 300 el número de muertos, cifra que se corrigió a 63 los días después del terremoto.
[26] El terremoto causó severos daños en lugares muy específicos en el área de la bahía, sobre todo en suelos inestables en San Francisco y en Oakland.
[27] Muchas otras comunidades sufrieron graves daños a lo largo de la región localizada en los condados de Alameda, San Mateo, Santa Clara, San Benito, Santa Cruz, y Monterrey.
Los daños más importantes en el Marina District de San Francisco (a 97 km del epicentro) se debieron a la licuefacción del suelo utilizado para crear terrenos frente al mar.
[15] En Santa Cruz, cerca del epicentro, se derrumbaron 40 edificios, matando a seis personas.
[30] Hubo daños en los puentes gemelos que cruzaban Struve Slough, cerca de Watsonville.
[30] En Moss Landing, la licuefacción destruyó la calzada de acceso a la carretera de Moss Beach que pasaba por una cuenca tidal; dañó el acceso y el estribo del puente que unía al cordón litoral de Moss Landing con el continente, y dañó un camino pavimentado en Paul's Island.
Otras sesenta y tres estructuras dañadas fueron consideradas demasiado peligrosas como para volver a ser habitadas.
[42] Durante los primeros días después del terremoto, la mayoría de los residentes del condado de Santa Cruz se quedaron sin energía eléctrica, y en algunas zonas no había agua.
El servicio telefónico permaneció en línea de manera limitada, proporcionando un vínculo crucial para los rescatistas.