Esta vez John Connor (Nick Stahl) tiene 19 años (año 2004), no tiene a nadie más que a sí mismo y vive según él "desconectado" del mundo para evitar que lo encuentren.
El general Brewster no descubre que el virus era Skynet haciéndose sensible, y John y Kate llegan demasiado tarde para impedir que lo active.
La T-X hiere mortalmente al general Brewster y controla los drones armados de CRS, que matan a los empleados.
Cuando se activa un acelerador de partículas, éste ata magnéticamente a la T-X al equipo.
La T-X sale de entre los restos, pierde las piernas e intenta arrastrarse hasta el interior del búnker para seguir a la pareja.
Al no tener núcleo, Skynet se ha convertido en parte del ciberespacio tras tomar conciencia de sí mismo, El Día del Juicio final comienza cuando Skynet dispara misiles nucleares por todo el mundo iniciando un ataque nuclear masivo que mata a miles de millones de personas.
[3] Peter Travers, de la revista Rolling Stone, la describió como una «potente película comercial»,[4] mientras que Stephen Hunter, de The Washington Post, comentó que sus creadores «se han esforzado en honrar el espíritu de la franquicia, no explotarlo, y lo llevan a un nivel nuevo y a un destino sorprendente».