El teatro físico es todo aquel teatro cuyo principal medio de creación y expresión es el cuerpo como la danza, el mimo, la acrobacia o las artes marciales, en lugar de los aspectos psicológicos en la creación del personaje.Ambas tradiciones, junto a las artes circenses, inspiraron entre otros al francés Jacques Copeau (1879-1949), quien ejerció una importante influencia en el teatro físico que se desarrollaría durante el siglo XX.De manera análoga al cubismo en la pintura, aparecieron diversos creadores y teóricos teatrales que comenzaron a experimentar con el cuerpo para sus creaciones escénicas, como una manera de romper con el dominio del texto y la literalidad.Brook, en su libro El espacio vacío pone énfasis en aquellos impulsos que hacen aflorar a las palabras.Para Barba, por su parte, la verdadera creatividad reside en lo pre-expresivo, vale decir, en aquello que es anterior a la palabra.[1] Parte del teatro físico contemporáneo lo conforma el llamado «nuevo mimo», inspirado en las técnicas originales de Decroux y Lecoq.