Teófilo (emperador)

Recibió una amplia educación de Juan el Gramático y fue un soberano más intelectual que su padre.

[2]​ Convertida en un destacado centro cultural del siglo IX, la universidad formaba principalmente a vástagos de familias acomodadas para servir luego tanto en la Iglesia como en la Administración Imperial.

[1]​ Se sucedieron las incursiones mutuas contra los bastiones fronterizos en una serie de cruentos combates que resultaron devastadores para la región.

[cita requerida] El ejército bizantino celebró varios éxitos iniciales: en 837 fueron tomadas y destruidas Samosata, Arsamosata.

[6]​ y Zapetra (Zibatra o Sozopetra), que según algunas fuentes era el hogar natal del califa al-Mu'tasim.

[1]​ Para compensar la derrota militar, emprendió en vano una serie de acciones diplomáticas destinadas a frenar la expansión árabe en el Mediterráneo.

[1]​ Cada vez con mayores dificultades para defender sus territorios occidentales y con problemas también en la frontera oriental, Teófilo solicitó infructuosamente la ayuda franca.

[9]​ Los venecianos, amenazados más directamente y teóricamente aún vasallos de Constantinopla, enviaron una flota, que fue derrotada por los árabes en Tarento en el 840.

[3]​ Para proteger el comercio septentrional con los territorios al norte del mar Negro, creó una nueva provincia con capital en Quersoneso, Climata.

[3]​ Teófilo nunca pudo recuperarse del golpe recibido, su salud se fue debilitando y murió a comienzos de 842.

[10]​ En otras provincias especialmente vulnerables y fronterizas, se crearon unas nuevas unidades administrativas las kleisuras, territorios con guarniciones permanentes establecidas para afrontar las invasiones árabes.

Reforzó las murallas de Constantinopla e hizo construir un hospital que se mantuvo hasta los últimos tiempos del Imperio bizantino.

Teófilo en un sólido aúreo , c. 829
El Asia Menor bizantina y la frontera con el Califato abasí hacia el final del reinado de Teófilo.