Sucesión al trono de Luxemburgo

En Luxemburgo, las normas de sucesión al trono están definidas en la Constitución del gran ducado.

El estatuto de 1907 prevé además que las princesas menores serán llamadas a la sucesión a falta de descendiente varón de la gran duquesa María Adelaida.

Esta ley de sucesión en Luxemburgo sigue un orden particular entre las ramas masculinas descendientes de las hijas del gran duque Guillermo IV.

La petición del conde de ser reconocido como heredero del gran ducado fue rechazada alegando que él y su rama tenían carácter dinástico a pesar de su matrimonio con la princesa Olga Alexandrovna Yurievskaya, hija del zar Alejandro II de Rusia.

La rama Merenberg también acabó sin descendientes masculinos; la última descendiente superviviente de la rama masculina fue la condesa Clotilda de Merenberg, prima hermana del gran duque Enrique.