Sor Juana Inés de la Cruz o las trampas de la fe

[1]​ No es una autora religiosa y mucho menos mística, tampoco debe ser tomada por una poetisa moderna que vierte en su obra sus vivencias subjetivas.

[1]​ Se trata de una autora barroca en la que la experiencia personal se transmuta en un conjunto de artificios establecidos por una tradición canónica;[1]​ el arte barroco separa al máximo al autor y su obra, por lo que es ajeno a la actitud romántica.

[1]​ Sor Juana se nos muestra como alguien que consigue habilitarse un rincón favorable a su desarrollo intelectual en un medio hostil.

Esta obra permite a Paz emitir un diagnóstico sobre la sociedad mexicana actual, heredera de la España del siglo XVII.

En ellas continuidad y cambio muestran una contradicción irreconciliable, con lo que el acceso a la modernidad sólo ocurre como desgarramiento.