Sitio de Víborg

La guarnición sueca se rindió el 12 de junio y la ciudad pasó a manos rusas.

Antes del sitio, Bruce y Bergholtz habían comandado operaciones de carácter defensivo, principalmente en San Petersburgo.

Fueron escogidos porque los mandos más experimentados en la guerra de asedio (incluyendo Borís Sheremétev, Jacob Bruce y Anikita Repnín) estaban concentrados en torno a Riga.

La parte oeste, conectada con el sector principal, tenía tres baluartes llamados Valport, Panzerlachs, y Evrop.

[4]​ En aquel momento, las fortificaciones estaban en mal estado porque el alto mando sueco no había centrado sus esfuerzos en la zona, y los fondos asignados a su mantenimiento eran insignificantes.

El 1702, aun así, se llevaron a cabo algunas reparaciones bajo la supervisión del capitán L.

[5]​ Según el historiador Yuri Moshnik, en 1710, la guarnición de Víborg tenía unos 6000 hombres; sus colegas B. Adamóvich y A.

[3]​ En todo caso, no había suficiente artillería, puesto que no se pudo llevar más debido al hecho que era muy difícil desplazar la artillería por tierra, y el hielo impedía el transporte por mar.

[24]​ Pronto, los generales mayores Bruce y Bergholtz se dirigieron a Apraksin con una propuesta para asaltar la fortaleza, sin esperar "la apertura de una brecha ".

Pedro se enteró por una carta de Apraksin, y afirmó que podía ser una acción “muy relevante, pero también muy peligrosa".

La marina que primero llegara a la zona proporcionaría una gran ventaja estratégica y táctico al bando respectivo.

Solo hasta el 25 de abril envió los cañones a Kotlin, donde Solovoy los recibió.

[29]​ La escuadra sueca estaba formada por siete barcos de línea y tres fragatas, junto con sus naves auxiliares, bajo el mando del almirante Gustav Wattrang.

Estos se retrasaron debido a los vientos desfavorables y llegaron cuando la flota rusa ya había partido hacia San Petersburgo.

[30]​ Al llegar a Víborg, Pedro inmediatamente inspeccionó las fortificaciones suecas y elaboró las instrucciones por los preparativos del sitio.

También ordenó que fueran emplazados 140 morteros ligeros para desalojar las tropas enemigas de los muros durante el asalto final, y también para realizar bombardeos nocturnos.

[31]​ Otras fuentes, sin embargo, no mencionen el heraldo ni la batalla naval; Fiódor Apraksin incluso escribió al zar que él “no podía imaginar” como una flota sueca podía ser enviada a Víborg, aunque tomó precauciones.

También, que había que seguir trabajando en las baterías bajo la responsabilidad de Bergholtz (aunque ya se habían emplazado diez morteros), debido a los "grandes pantanos y el suelo rocoso".

Apraksin preguntó a Pedro si había que esperar que Bergholtz acabara la construcción de sus baterías o si tenían que asaltar la ciudad sin esperarlo; Apraksin se fue decantando por la segunda opción para no perder más tiempo ni recursos, y porque el calibre de la artillería de Bergholtz era insuficiente para dañar seriamente las defensas suecas.

Mediante la toma de Víborg, el Zarato ruso mejoró considerablemente su acceso al mar Báltico, desde el cual podían lanzar más ataques contra Finlandia, y una poderosa fortaleza que defendía su nueva capital, San Petersburgo.

Esto retrasó las operaciones de los suecos, que no establecieron un sitio terrestre efectivo hasta el otoño.

Carlos XII se negó a destinar más tropas y material bélico, lo que condenó el sitio al fracaso.

Víborg demostró su importancia como una base militar de 1712 a 1714 para las operaciones rusas en Finlandia.

[40]​ Durante las conversaciones de paz con los suecos “la cuestión de Víborg” fue debatida, y Pedro ordenó a su representante, Andréi Osterman, que presionara Suecia para que cediera Víborg y Riga.

Después del Tratado de Nystad, Víborg fue incorporado oficialmente al Imperio ruso.

Este fue el inicio de un nuevo periodo en una ciudad con una historia multicultural con marcadas influencias culturales rusas, suecas, finesas y alemanas.

Grabado de 1709 que muestra el Castillo de Víborg a la izquierda.
Las fortificaciones de Víborg antes del sitio.
El teatro de operaciones de la Gran Guerra del Norte , 1709–1721.
Movimientos de las tropas rusas y posiciones de las baterías.
Ilustración contemporánea de la flota rusa llegando a Víborg .
Víborg a finales del siglo XVII , después de ser refortificada por los rusos.