La especie que tiene más distribución es la Sicarius terrosus (S. Thomisoides) que se puede encontrar en toda África y América del Sur, en Chile se le encuentra desde la I región hasta la Región metropolitana, de preferencia en los bordes costeros.
En este aspecto las arañas Sicarius son notables ya que pueden achatar su perfil y cubrirse con material suelto del entorno en cosa de segundos quedando prácticamente invisible al ojo humano.
[2] Estudios recientes mencionan que la composición del veneno de las arañas del género Sicarius presenta similitudes al de las arañas del rincón o violinistas (Loxosceles)[3], sin embargo, debido a su carácter tímido y sus hábitos que las colocan en ambientes lejanos a la actividad humana, se considera que las probabilidades de accidentes con estas arañas son bajas.
No huyen ante la presencia del ser humano prefiriendo alejarse lentamente o quedarse quieta.
De hábitos más bien diurnos, esta captura a sus presas al acecho y también poseen tres pares o seis ojos a diferencia de las otras que tienen cuatro pares.