En Cataluña la persistencia del arte románico hasta el siglo XIII produjo estructuras arquitectónicas como la catedral de Lérida.
Su estilo tardorrománico, o de transición, posee las formas románicas y la monumentalidad del gótico.
[1] Sus portadas y capiteles generaron un importante taller escultórico románico conocido como la Escuela de Lérida.
El magnífico claustro, con su galería mirador sobre la ciudad, se realizó entre los siglos XIII y XIV.
La catedral fue terminada en el siglo XV con la construcción del campanario y la puerta de los Apóstoles.
En el año 1707 y dada su importante posición estratégica, la Seo Vieja se convirtió en cuartel militar, no volviendo a desempeñar funciones religiosas.
En el mismo lugar se asentaba la catedral paleocristiana y visigótica, que luego fue utilizada como mezquita mayor en tiempos de la ocupación musulmana y que había sido construida en el año 832.
Este diseñó una catedral bajo los cánones románicos (planta y alzados articulados “ad quadratum” con rectángulos de proporciones 1,3;
[7] El corto espacio de tiempo en que se construyó la Seo Vieja, hace pensar en un programa unitario y con pocas modificaciones.
La catedral presenta una planta basilical de cruz latina con tres naves longitudinales siendo más ancha y alta la central.
La unión de las naves laterales con la central está resuelta por seis grandes columnas (tres por costado) coniformes.
[9] La primera actividad escultórica en unos capiteles historiados presentan un estilo paralelo al norte de Italia, inspirado en los trabajos que Benedetto Antelami había desarrollado en el baptisterio de Parma,y relacionados con la figura de Ramón de Bianya, son unos relieves con gran sentido descriptivo y figuras con gran energía, donde se puede ver en sus fondos la señal del trabajo con trépano, la iconografía que representa son escenas bíblicas junto con animales fantásticos y motivos vegetales y se encuentran principalmente en los capiteles que comunican el transepto con las naves laterales.
Situado en los pies de la nave se encuentra el claustro con sus dependencias y la torre del campanario.
El arte gótico entró tímidamente al final del siglo XII en las catedrales de Lérida, Tarragona y Ávila entre otras.
[15] Reconstruida por la familia del obispo Ferrer Colom en el siglo XIV según la clave de bóveda.
En el año 1925 el comandante Combelles al derribar la pared que cerraba la capilla, se encontró: ...24 fragmentos de figuras, sentadas, unas con las cabezas rotas, otras con las cabezas encontradas y pegadas.
[16] De estas veinticuatro figuras solo se conservan una quincena, todas decapitadas.
Los nervios que componen la bóveda estrellada están todos profusamente decorados con motivos florales y heráldicos.
[22] El ábside central es el que muestra más decoración lombarda con lesenas, arcuaciones ciegas y tres ventanas de arco de medio punto con dos arquivoltas lisas reposando en unos capiteles con esculturas, un friso une las tres ventanas.
Las cubiertas del edificio son cónicas en los ábsides y a dos vertientes en la nave central.
En fachada oeste que da acceso al claustro se encuentra la puerta de los Apóstoles formando parte del recinto claustral.
Sus arcadas son la exterior apuntada de tipo islámico y semicirculares las dos interiores.
La puerta está formada por arquivoltas sostenidas por pilares y columnas montados sobre un zócalo, con capiteles.
En las arquivoltas, capiteles e impostas se encuentran decoraciones con motivos geométricos y vegetales vinculadas a un origen tolosano y que se relacionan con elementos escultóricos de la catedral de Tarragona.
Data de finales del siglo XIII, constituían la entrada principal de la catedral, la central junto con otras dos laterales, que coinciden con las tres naves del templo y que debieron quedar anuladas al edificarse delante el claustro.
Colocada en la fachada oeste, es desde esta puerta por la que se accede exteriormente al claustro.
En el año 1490 se construyó por Francesc Gomar un pórtico parecido al de la puerta dels Fillols, del que se conservan solo restos, este porche tenía tres bóvedas de crucería, las dos laterales más pequeñas.
Las pinturas están datadas desde el año 1300 de estilo rígido ligado a la época románica hasta mediados del siglo XIV ya con influencia italianizante.
El claustro sufrió desperfectos durante la ocupación militar, estuvo dividido en dos pisos durante dos siglos y todas sus galerías fueron tapiadas, para evitar corrientes de aire y hacer espacios cerrados.
La última planta está coronada con pináculos y arbotantes góticos y gárgolas, esta última parte del campanario estuvo realizada por el maestro Carlí a principios del siglo XV.