Jacinto Roque de Sena Pereira

En ese periodo se preparó para la Invasión portuguesa de 1816, que terminó por derrocar a las tropas artiguistas dirigidas por José Gervasio Artigas, instituyéndose luego el la Provincia Cisplatina.Era un hombre que fue sumamente considerado en la formulación de planes tácticos y hostigamiento del adversario, a la par que de las operaciones combinadas, apoyo y enlace con los ejércitos de tierra.Sus condiciones personales, educación e inteligencia, lo llevaron a incluso intervenir en gestiones de carácter muy diverso, incluso diplomáticas.Al igual que muchos militares portugueses en la Provincia Cisplatina, se casa con una dama oriental, desposando en el Departamento de Soriano a la doña Eugenia Gadea Paredes.Fue prisionero del almirante Guillermo Brown tras la Batalla de Juncal, este último reconoció su valentía y lo recomendó a su gobierno, “por su bravura e intrépida defensa, que lo presentan como un compañero de armas”.