Esta manzana que alberga el conjunto conventual y otras construcciones de interés, da frente a espacios públicos en sus cuatro fachadas; lindando por el naciente con la carretera general que une Tacoronte con Valle de Guerra, por el poniente con la Plaza del Cristo, por el Norte con la calle del Cristo y por el Sur con una nueva vía peatonal.Su fachada norte y principal está trabajada en cantería fina, esta particularidad le brinda monumentalidad, escenografía, composición, significado y buenas perspectivas.La estatua orante del fundador de la iglesia, Tomás Pereyra de Castro y Ayala, figura en la capilla mayor, quien trajo a la isla la imagen del Cristo que se ve en el retablo.El Santuario consta de tres naves con altos arcos en cantería del país; en la orfebrería que alberga la capilla mayor destacan el frontal del altar y el tabernáculo, excelentes obras que el canario Juan Domínguez ejecutó en la segunda mitad del siglo XVIII.Al coro se accede, como es habitual en este tipo de recintos, desde la galería alta del claustro.