Su hermano Joaquín Elío y Ezpeleta fue un destacado general carlista.
Al igual que su hermano Joaquín, participó en la primera guerra carlista a favor de Carlos María Isidro de Borbón y, terminada la contienda, permaneció muchos años emigrado en Francia.
[1] En 1851 fue a las Islas Filipinas y llegó a ser magistrado de la Audiencia de Manila, cargo que ocupó hasta 1873.
[2] Regresado a la Península, desempeñó en el campo carlista la presidencia del Tribunal Superior Vasco-Navarro, establecido en Oñate en 1875, durante la tercera guerra carlista.
[3] Luego fue delegado de Carlos VII en Navarra hasta 1897.