El síndrome de Otelo (o de Othello) fue nombrado por el psiquiatra inglés John Todd (1914-1987) en una publicación con K. Dewhurst titulada "The Othello Syndrome: a study in the psychopathology of sexual jealousy" (Journal of Nervous and Mental Disorder, 1955, 122: 367).
[5] El síndrome de Otelo afecta a ambos sexos por igual pero es más común en los hombres.
Para ello se sirve de detalles sin importancia que considera pruebas definitivas.
El delirio de celos domina la vida del enfermo, afectando a sus actividades laborales, sociales y personales, tendiendo al aislamiento.
Si bien la psicoterapia puede ser un método eficaz para tratar a las personas mórbidamente celosas, no es suficiente cuando la naturaleza de su enfermedad es más grave.
[7] Aunque esto puede ser cierto, la terapia cognitivo-conductual es el tratamiento que ha demostrado ser más eficaz.
[8] Médico Psicológico Social Los celos pueden llevar a la violencia en cualquier relación, ya sea normal o mórbida.
En un reciente estudio sobre los celos realizado por Mullen & Martin en 1994, el 15% de los hombres y las mujeres dijeron que en algún momento habían sido "sometidos a violencia física a manos de una pareja celosa".
[11] [16]Un estudio realizado en Ecuador, por ejemplo, reportó que se consideraba habitual y esperado que celos románticos masculinos fueran seguidos de violencia física hacia la pareja,[17] como un mecanismo para reafirmar el control y la autoridad masculinos.
[19] Resultados empíricos anteriores destacaron que el femicidio cometido por una pareja íntima actual o expareja en algunos casos, es seguido por el suicidio del perpetrador, un fenómeno conocido como feminicidio-suicidio de la pareja íntima (FSPI) .
Los niños también pueden oír por casualidad discusiones o ser testigos de violencia física entre sus padres.