Recibe el nombre del médico alemán Max Muenke, que descubrió esta enfermedad en 1996.
Entre ellas se encuentran: Aunque estos sean los síntomas más comunes, han aparecido casos con proptosis, y polidactilia.
Las posibles variaciones en el fenotipo craneal se determinan mediante radiografías y/o Tomografía axial computarizada (TAC) del cráneo.
Sin embargo, para poder determinar que la craneosinostosis u otras de las posibles deficiencias con respecto al fenotipo silvestre se deben al síndrome de Muenke, se debe recurrir a un análisis genético tras las pruebas físicas.
Si los padres no están afectados por el síndrome de Muenke, el riesgo disminuye.