[6][7] Elaboró el expediente técnico presentado al entonces Instituto Nacional de Cultura a través del cual se emitió la Declaratoria de Patrimonio Cultural de la Nación de los «conocimientos y usos tradicionales del ayahuasca practicados por las comunidades nativas amazónicas, como garantía de continuidad cultural» en la Resolución Directoral Nacional n.° 836/INC del 24 de junio de 2008.
[8][9] Fue la creadora del canto ritual «Ábrete, corazón» que definió como íkaro y fue recibido durante una dieta, en donde según ella: «Tuve un sueño fuerte, vino con la imagen de un árbol que se abría, que se expandía.
Al mismo tiempo yo sentía cómo en mi cuerpo el aire entraba y salía, era el proceso de respiración, que no es otra cosa que el intercambio con la vida: tomar la energía de la vida y soltar».
[1] El canto fue versionado y popularizado por Alonso del Río en su álbum Punto de fase de 2001.
Diversas personas e instituciones vinculadas a la medicina tradicional y la investigación manifestaron su pesar y le rindieron homenaje, como el Centro Amazónico de Antropología y Aplicación Práctica (CAAAP), Plantaforma para la Defensa de la Ayahuasca, la Asociación Transpersonal del Perú y el Grup Associat pels Serveis de Salut (GASS) en Barcelona.