Se destacó en la promoción del canto coral en Argentina y por su labor docente en varias colonias de inmigrantes suizos y alemanes en el país.
María era nieta de Peter Zimmermann, el primer colono fallecido en Esperanza.
Ejerció como docente durante más de cinco décadas, enseñando en alemán, francés y castellano.
También contribuyó a la formación de grupos corales en otras comunidades, como en Isla Verde, donde enseñó en la Escuela Alemana Artagaveytia.
También tuvo un impacto cultural en San Jerónimo Norte, Humboldt y Baradero, colaborando en la creación y fortalecimiento de sociedades corales en estas localidades.