Hombre de una extensa cultura le otorgó al liderazgo sindical que ejerció en la Asociación Nacional de Actores, un relieve y una consideración inusuales.
Fue dos veces diputado federal y senador en la XLVI Legislatura.
Desde ese cargo estimuló generosamente a una generación de cineastas que le dieron un nuevo e intenso perfil a la cinematografía mexicana.
Construyó la Cineteca Nacional, fundó el Centro de Capacitación Cinematográfica, instituyó el Festival Internacional Cervantino ... y un interminable etcétera.
En 1938 actuó en la última temporada del teatro de Orientación, bajo la dirección de Julio Bracho y Xavier Villaurrutia en las obras Anfitrión 38 y Minnie la cándida.