Una vez derrocado Huerta, Tabasco sería escenario de una intensa lucha de facciones, escenificada por los distintos grupos revolucionarios, destacando la rivalidad entre Luis Felipe Domínguez y Carlos Greene, quienes se enfrascaron en una intensa lucha personal por el poder.
La situación se prolongó por 34 años, durante los cuales, si bien México experimentó un notable crecimiento económico y estabilidad política, estos logros se realizaron con altos costos económicos y sociales, que pagaron los estratos menos favorecidos de la sociedad.
Díaz se había perpetuado en el poder, y en Tabasco, Abraham Bandala Patiño había hecho lo mismo: el general fue gobernador de Tabasco, con pequeñas interrupciones en su mandato, desde 1894 hasta diciembre de 1910, esto es, aproximadamente 16 años.
El descontento comenzó a adquirir caracteres cada vez más peligrosos para la dictadura.
Cuando Francisco I. Madero decidió alzarse contra Porfirio Díaz, abanderado con su lema Sufragio efectivo, No reelección, encontró en un gran número de compatriotas apoyo valiente y firme para su lucha.
Sin embargo, el descontento había empezado a manifestarse, y la actividad revolucionaria iría creciendo.
Manuel Mestre Ghigliazza incrementó su actividad; José María Pino Suárez se unía, desde Yucatán, a las filas maderistas, y Félix Fulgencio Palavicini había sustituido a José Vasconcelos Calderón en la dirección del Antirreeleccionista, periódico fundado por Francisco I. Madero.
Tal era la situación en Tabasco, cuando el 20 de noviembre de 1910, Aquiles Serdán fue asesinado en Puebla y con su muerte, el pueblo entero se sintió agredido y estalló finalmente la lucha armada.
[3] No obstante, Gutiérrez no se amedrentó y reorganizando sus fuerzas a las que se le unieron Fernando Aguirre Colorado, Isidro Cortés, Áureo L. Calles, José Merced Gamas y Felipe Ordóñez, y con mejores elementos que el año anterior, decidió volver a emprender la lucha en abril de 1911.
[6] La escaramuza duró menos de dos horas, ahí se le unió Pedro Sánchez Magallanes.
Al día siguiente, los rebeldes marcharon sobre la villa de Cárdenas la cual tomaron sin disparar un solo tiro,[6] ahí se le incorporan Ramón Sosa Torres y Juan Torres, la revolución había comenzado a triunfar en Tabasco».
En ambas poblaciones Gutiérrez cambió las autoridades porfiristas poniendo a revolucionarios, y partió hacia Comalcalco villa que tomó el 11 de abril, y entró a Paraíso tomando la plaza en las mismas condiciones, sin disparar un solo tiro.
[6] El hecho más lamentable en esta derrota, fue la muerte del revolucionario tabasqueño Ignacio Gutiérrez Gómez.
Gobernador, la paz ha sido firmada, debiendo cesar inmediatamente y de modo definitivo las hostilidades.
En Tabasco el gobernador Manuel Mestre Ghigliazza reconocía a Victoriano Huerta como Presidente de la República, lo que provocó las protestas de los hermanos Fernando y Ernesto Aguirre Colorado, así como de Pedro C. Colorado, quienes decidieron entrar en contacto con Venustiano Carranza solicitándole apoyo con armas y municiones para lanzarse a la lucha.
El enviado del gobernador Valdez solicitó una tregua para analizar las peticiones, sin embargo, los huertistas no respetaron dicha tregua y atacaron a los revolucionarios, quienes lograron repeler el ataque.
[16] En Tabasco mientras tanto, las escaramuzas entre rebeldes y federales continuaban, sin que ninguno de los dos grupos obtuviera grandes triunfos.
Por esas fechas se formó otro contingente revolucionario que operaba en la región de Los Ríos, comandado por Luis Felipe Domínguez Suárez, en el que también participaban su hermano José Eusebio Domínguez Suárez y José Preve, conformando la "Brigada Usumacinta".
[17] La Brigada Usumacinta ocupó las poblaciones de Balancán, Montecristo (hoy Emiliano Zapata) y Jonuta.
Greene buscó nuevamente entrevistarse con Carranza a fin de revitalizar la lucha en el estado, para lo cual viajó a Veracruz la que encontró ocupada por los estadounidenses, se dirigió al jefe de las tropas invasoras para solicitarle la compra de parque y armamento, sin obtener éxito, por lo que viajó hasta Tuxpan, Veracruz, donde se encontraban tropas constitucionalistas al mando del general Cándido Aguilar, quien lo apoyó con dinero y municiones.
Tras la rendición de los huertistas, Carranza le comunicó al gobernador Alberto Yarza que continuara en San Juan Bautista al frente del gobierno, hasta que se presentaran sus enviados a efectuar el cambio de gobierno.
[21] Al tomar posesión como gobernador del estado Luis Felipe Domínguez, los revolucionarios de la Chontalpa no aceptaron que la gubernatura estuviera ocupada por un revolucionario de la región de Los Ríos y comenzaron a suscitarse serias fricciones, por lo que el recién nombrado gobernador decidió abandonar la capital del estado.
Los hombres se insubordinaron bajo el mando del coronel Francisco Gil Morales y asesinaron al gobernador Pedro C. Colorado.
Carranza enterado del asunto, envió al general Francisco J. Mújica para que avanzara hacia Tabasco y acabara con la sublevación.
Hacía falta, sin embargo, establecer las bases constitucionales que habrían de regir el destino del país.
Partidarios de Félix Díaz sobrino del General Porfirio Díaz que se encontraba alzado en armas contra el gobierno, atacaron Teapa y hubo otros combates en los límites de Tabasco y Chiapas.
Pero Domínguez desconociendo el triunfo de Greene se declaró en rebeldía junto con sus seguidores.
En su lugar quedó Tomás Garrido Canabal quien, durante el interinato, tuvo que hacer frente a los ataques dominguistas.
Los dominguistas aprovecharon la ocasión e hicieron prisionero al gobernador y a los Diputados, pero pronto lograron su libertad, siendo expulsados de Villahermosa hacia Frontera, la cual es nombrada "capital provisional", sin embargo, también tuvieron que abandonar esa ciudad, para refugiarse en la Barra de Santa Anna.
[26] En octubre de 1920 un escolta del gobernador Greene entró al Congreso del Estado, asesinando a los diputados Manuel Lazcano y Alberto Nicolás Cámara, resultando heridos el presidente de la misma, Pedro Jiménez Calleja y Guillermo Escoffié, quien murió unos días más tarde.