La oposición, reunida en una Liga Nacional Democrática, presentó a su vez la candidatura del general Ernesto Montagne.
Dos jóvenes arequipeños que iban a parlamentar, Carlos Bellido y Arturo Villegas, cayeron abaleados.
Odría quedó así como único candidato y vencedor de las elecciones, que fueron una auténtica farsa.
Para 1955 el gobierno del general Odría se hallaba ya desgastado.
Javier de Belaúnde, Héctor Cornejo Chávez, Juan Chávez Molina, Alberto Flórez Barrón, Mario Polar, Roberto Ramírez del Villar y Jaime Rey de Castro son los autores.
Esta invocación, divulgada por La Prensa y Caretas, fue como un campanazo que contribuyó a despertar la conciencia cívica adormecida por 8 años de dictadura.
Sus fundadores fueron Manuel Mujica Gallo, Pedro Roselló, Alejandro Villalobos y Carlos Enrique Ferreyros Urmeneta.
Ante ello, las fuerzas democráticas se dirigieron a tomar el Teatro.
Fueron heridos gravemente Óscar Balbuena Marroquín y Edgard Guzmán Pacheco, entre otros.
La Coalición Nacional dirigió un enérgico cable a Odría, exigiendo la destitución de Esparza Zañartu.
Los dirigentes políticos y gremiales le expresaron con firmeza que sin la destitución de Esparza no habría solución posible.
La rebeldía de Arequipa se extendió a todo el Perú.
Se multiplicaron pronunciamientos de agrupaciones políticas, instituciones sociales y personalidades.