El armazón arquitectónico en madera del retablo ha desaparecido, pero se conservan los cuatro lienzos que lo componían.
[2] El número de retablos emprendidos por el Greco fue amplio, pero su conservación hasta la actualidad ha sido poco afortunada.
Algunos han sido trasladados de su ubicación original, o muy alterados por reformas posteriores.
Lleva una barba blanca como el personaje del lienzo San Jerónimo penitente, de medio cuerpo, en el que parece inspirada esta obra, pero sin su aspecto inquisitorial, lo que demuestra la maestría del Greco al superponer otra personalidad al mismo modelo de rostro.
Este autor también considera que el rostro del santo —un joven con una corta barba negra— tiene ciertos rasgos crísticos.