El matrimonio tuvo una única hija, llamada María, que vivió sólo tres semanas y fue enterrada en la Grote Kerk en Breda.
Juntos tendrían a Enrique, Margarita y Renato.
En 1544 al servicio del emperador Carlos V, durante la Guerra italiana de 1542-1546 tomó parte en el asedio de San Dizier, que terminó con victoria imperial el 17 de agosto.
Allí fue mortalmente herido y murió con el emperador presente a su lado.
En él es representado en deplorable estado de descomposición, pero levanta con su mano izquierda su propio corazón, símbolo del amor triunfante.