Reginnaglar

Reginnaglar (del nórdico antiguo: uñas de dios o clavijas sagradas[1]​) eras una sujeciones de hierro o aleación para fijar los öndvegissúlur (postes) en el hásæti (o alto sitial de un caudillo vikingo).

El término y uso particular de las reginnaglar aparece con detalle en las sagas nórdicas, a destacar la descripción del templo dedicado a Thor que erigió Þórólfur Mostrarskegg en su hacienda durante los inicios de la colonización de Islandia.

[2]​[3]​[4]​ Las fijaciones metálicas, cuyo significado era inequívocamente pagano y muy popular en la Escandinavia precristiana, supuestamente servían para la defensa frente a elfos malvados y espíritus del submundo, a excepción de los enanos que se consideraban grandes herreros artesanos y protectores del hogar.

El mismo concepto fue adoptado por los sami, probablemente influenciados por los nórdicos.

[7]​ El concepto del pilar cósmico es muy antiguo, ya se encontraba presente en tradiciones indo-europeas como el Dhruva indo-iraní.