Regimini Ecclesiae universae

La Regimini Ecclesiae universae es una constitución apostólica promulgada por el papa Pablo VI el 15 de agosto de 1967 para reformar la Curia Romana, según las prerrogativas del Concilio Vaticano II.El nombre del documento proviene de las tres primeras palabras del mismo en latín, que en castellano quiere decir «el gobierno de la Iglesia universal».La reorganización de los mismos se fue desarrollando en los veinte años sucesivos al concilio.Al morir el papa, su sucesor Juan Pablo II, retomaría los trabajos de revisión.Al final del cometido, el nuevo pontífice promulgó la Constitución apostólica Pastor Bonus.