Regeneración (Portugal)
Aunque no pueda ser claramente delimitado, el período de la regeneración duró unos 17 años.Tampoco fue casualidad que uno de los patriarcas del vintismo, Manuel Borges Carneiro, eligiera el título Portugal regenerado para su principal manifiesto político.En este contexto, Manuel Fernandes Tomás hizo famoso, en una intervención parlamentaria, el entonces pospuesto concepto de nuestra feliz Regeneración.El programa político regenerador se basó en una serie de reformas administrativas, económicas y sociales, cuya aplicación tenían como objetivo fomentar el crecimiento económico y superar las limitaciones de naturaleza política e institucional que habían impedido al país acercarse a los niveles europeos de desarrollo.Los regeneradores atribuían la culpa de estos bloqueos a la mala gobernanza y la pérdida de tiempo con las múltiples luchas políticas e ideológicas que hasta entonces habían plagado la vida política en Portugal.