Rebelión de Thomas Wyatt

La razón exacta del levantamiento ha sido objeto de mucho debate.

La implementación de estos planes fue impedida cuando Simon Renard, embajador imperial en Inglaterra, sospechó una conspiración e informó al Lord Canciller, Stephen Gardiner, quien interrogó a Courtenay y este reveló que había planes para una rebelión.

Dándose cuenta de que en esas circunstancias una rebelión no era segura, Croft se dio por vencido.

Grey fue más decidido, pero solo logró reunir una fuerza de 140 rebeldes, muchos de los cuales eran sus propios hombres, por lo que se negó a entrar a Coventry y se entregó.

Carew trató de dar apoyo a la sublevación en Devon, pero los nobles protestantes se mostraron poco dispuestos a cometer traición y los habitantes del condado eran campesinos mayoritariamente católicos.

En ese momento, los barcos franceses se vieron incapaces de mantener su posición y regresaron a Francia.

El 26 de enero, Wyatt ocupó Rochester y lanzó una proclama al condado.

Un destacamento fue enviado desde Londres para contrarrestarlo bajo el mando del duque de Norfolk.

La rebelión parecía entonces tan formidable que la reina y el Consejo enviaron una delegación a entrevistarse con Wyatt para conocer sus condiciones.

Retrato de Thomas Wyatt el Joven por Hans Holbein el Joven , circa 1540-42.
Representación de Londres en el siglo XVI (1895).