Raúl Osiel Marroquín

Quiso ascender en la milicia y estudiar medicina pero la falta de recursos financieros lo obligaron a renunciar.

[2]​ Estuvo preso en Tampico durante 14 meses bajo el cargo de Robo con violencia.

Sus crímenes tuvieron muchas similitudes con los de los asesinos en serie norteamericanos John Wayne Gacy y Robert Berdella, siendo el móvil, sin embargo, un poco diferente: Gacy asesinaba a sus víctimas debido a una represión de su propia homosexualidad que proyectaba hacia los demás (se sentía atraído hacia ellos, razón por la cual los culpaba de su homosexualidad), Berdella por frustración hacia otras personas.

En cambio, Marroquín, a pesar de que sus crímenes también poseían marcados rasgos homoeróticos (aunque el mismo Marroquín declaró no ser homosexual[3]​), se puede apreciar en él a un sociópata o psicópata dentro de un marco sociocultural que, de una u otra forma, le dio un escaparate para su violencia contenida, dirigiéndola hacia una minoría.

Creía que sus actos tenían una justificación moral, aunque era plenamente consciente de las implicaciones éticas y jurídicas de sus actos, pensaba que ante la sociedad sus delitos eran menores y hasta justificables.