La maduración y conservación es realizada por maestros queseros, que a pesar de los avances de la tecnología guardan celosos las formas de elaboración tradicionales.
[1] Se caracteriza por su aspecto al corte, con abundantes ojos distribuidos heterogéneamente, un agradable aroma y un franco sabor, en el que se perciben sabores ácidos y salados dentro de los elementales, con sensaciones trigeminales picantes.
La persistencia en boca es larga con evolución lenta, dejando un agradable recuerdo.
[1] Todo el queso amparado bajo dicha marca de garantía es sometido a una serie de controles que engloban todo el proceso productivo, desde la explotación ganadera hasta la expedición del producto final, garantizando su calidad.
[1] Todos los quesos amparados bajo la denominación van acompañados de esta contraetiqueta, sello que asegura la calidad del producto.