[1] El nombre de esta quebrada se debe a que en la antigüedad en sus orillas se hacía jabón con huesos de ganado.
Años después la quebrada La Hueso fue canalizada casi desde su entrada en el perímetro urbano de la ciudad y gracias a su posición estratégica en el occidente de Medellín, la Línea B del Metro sigue su cauce, desde su desembocadura hasta la Estación San Javier.
[1] Además es una de las más torrenciales, generando muchas veces emergencias e inundaciones especialmente en el barrio Naranjal, ubicado en la parte baja de su cuenca.
Recibe en su cauce unos 23 afluentes de los cuales el más importantes es la quebrada Ana Díaz.
Se destacan a su vez las quebradas La Leonarda, El Salado, La Pelahueso, La Magdalena y Zanjón Santa Mónica.