Las pilas que sostienen los arcos, poseen tajamares, y se remata con un pretil de fábrica.
[1] La torre posee en su interior una capilla, que tiene acceso desde la calzada del puente, mediante una puerta con arquivoltas, situándose a ambos lados de la misma sendas lápidas con inscripciones alusivas al obispo de Jaén, D. Alonso Suárez de la Fuente del Sauce, que fue quien lo financió.
El obispo de Jaén financió las obras para resolver el grave problema causado por las crecidas del río], que todos los años destruían el camino entre las dos ciudades más importantes de la zona, Baeza y Jaén.
Se construyó entre 1505 y 1508, según indica la lápida existente en la capilla, bajo la dirección del maestro Pedro de Mazuecos.
Muy dañado durante la guerra civil española, volvió a restaurarse, en 1940, por el también ingeniero Luis Chocano Martínez, que le dio la imagen que se conserva hoy en día.